Waldo Ponce vuelve a su querida tierra natal para estar con sus amigos y familia. Había expresado su deseo de volver a Los Andes, pero sus negocios y la educación de sus hijos eran la prioridad.
Luego de retirarse del equipo de la Universidad de Concepción, comenzó a emprender con su marca de zapatillas “Ar3a By Waldo Ponce”, un año después de colgar los botines en 2018.
Poco después, instaló una serviteca en Santiago. Sin embargo, con el estallido social y la pandemia su vida cambió, volviendo a la ciudad donde el exmundialista de Sudáfrica 2010 se crió.
“Nos vinimos a Los Andes cuando estaba el peak de la pandemia. Lo hicimos para estar más tranquilos y porque, además, nos dimos cuenta que los niños podían hacer sus clases online.
De a poco percibimos que eso facilitaba más las cosas. Y, finalmente, terminamos quedándonos con mi familia. Ya estábamos acá a mediados del año pasado”, comenta el exdeportista para LUN.
También indicó al mismo medio que “me siento tranquilo. Además estoy viendo posibilidades de trabajo relacionados un poco más en lo mío, que tiene que ver con el fútbol y el deporte en general.
También volví a jugar a la pelota con mis amigos de la infancia. Se han dado hartas cosas bonitas, como revivir lo que uno hacía cuando era niño”.
También podrías querer leer: nuestro medio asociado La Bahía on Line
También podrías querer leer: Un San Felipeño fallecido dejó accidente vehicular en La Cruz
Al preguntarle sobre sus negocios en la capital, en especial la serviteca, respondió que “la tengo arrendada porque fue difícil. Hubo momentos malos por la pandemia también. Me costó en realidad. Le puse todo el empuje y las ganas hasta el último momento y me terminé aburriendo. Independiente de lo que podría generar el negocio.”.
