En estas últimas décadas Gendarmería ha cambiado mucho y así lo reconocieron los suboficiales mayores que fueron agasajados en el Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe con motivo de la celebración de su día. Suboficiales Mayores
En una ceremonia en la que se respetaron todas las medidas del plan paso a paso, y que estuvo presidida por la directora regional de Gendarmería, coronel Sandra Toledo, y el jefe de la unidad penal, mayor Carlos Ortiz, se reconoció el esfuerzo y dedicación de los cuatro funcionarios que llegaron a la cúspide de sus carreras penitenciarias.
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En la oportunidad el mayor Ortiz sostuvo que “fue una ceremonia sencilla y muy emotiva.
Tres de ellos, los que ya cumplieron con su máximo años de servicio, están prontos a retirarse de las filas de Gendarmería y dejan un vacío y esperamos que sus semillas, sus conocimientos, hayan llegado a los funcionarios que recién vienen llegando a la institución”.
Una de las funcionarias reconocidas, la de mayor antigüedad en el servicio, fue la suboficial mayor Jessica Fernández. La funcionaria destacó los cambios que ha experimentado el servicio durante sus últimos 30 años.
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“Cuando yo ingresé al servicio, que fue en enero del año 92, era muy distinta la situación a la que existe hoy en día. En un principio era muy difícil, muy sacrificado. Las unidades penales no eran lo mismo que lo que son ahora. La situación económica tampoco era la misma en las unidades penales, entonces los funcionarios pasábamos muchas penurias, pasábamos frío y muchas veces pasábamos hambre.
A las generaciones nuevas les digo que aprovechen esta oportunidad que tienen de pertenecer a esta institución que es tan maravillosa, pero también hay que cuidarla, hay que seguir el buen camino, hay que seguir los buenos ejemplos”.
