Con el fin de evaluar las implicancias que tendrá el proyecto y responder a las inquietudes de los vecinos; el municipio, dirigentes vecinales y Serviu, abordaron las medidas de mitigación previo al inicio de la construcción de los 100 departamentos del comité Diego de Almagro, que se espera comience la próxima semana y que se extenderá por un año.
Lo anterior, con el propósito que las obras, desde el comienzo incorporen todas las medidas de mitigación ambiental que la normativa exige, que si bien son de carácter temporal mientras dure la obra, están relacionadas con el polvo en suspensión, el movimiento de tierra, los horarios de trabajo, los ruidos y otras dificultades que se pueden presentar.
Con respecto a lo anterior, uno de los problemas se relaciona con el cierre del terreno que busca evitar un tránsito irregular de personas, considerando los riesgos que representa pasar por el interior de una faena.
El director de Obras Municipales, Claudio Díaz, sostuvo que, si bien el proyecto tiene distintos impactos, “el beneficio que generará a futuro es de un tremendo valor, incluyendo la apertura de la calle Costanera en forma definitiva y la consolidación de Diego de Almagro por la calzada poniente, lo que se transformará en un buen aporte para la circulación vial del sector”.
Añadió que, si bien una de las solicitudes de los vecinos se relacionaba con habilitar una servidumbre de paso, “se aclaró que se trata de un terreno particular, por ende, el tránsito que se realizaba era irregular y hoy es la empresa quien asume la responsabilidad de cualquier situación que ocurra al interior, por lo tanto, se recomendó que no circule nadie que no trabaje en la faena”.
Díaz sostuvo que esta reunión abrió un diálogo permanente con los vecinos, de tal manera que cualquier situación en particular que se presente durante el tiempo que dure la obra pueda ser discutida y resuelta en su momento.
