A lo menos tres “manifestantes” resultaron heridos por perdigones de escopeta la noche de este viernes, luego que a balazos el comerciantes de la distribuidora El Sureño, repelió un aparente intento de saqueo a sus locales comerciales.
Grupo de comerciantes de la ciudad llegaron al lugar a apoyarlo e impidieron que fuera detenido por Carabineros.
La grave situación que hasta ahora no se había visto desde que empezaron las manifestaciones sociales en San Felipe
Cuando un grupo indeterminado de personas que habían marchado por el centro de la ciudad, regresaron a la Cancha de Tenis
Para seguir manifestándose con barricadas encendidas, como ya se ha hecho habitual en las noches en ese punto de la ciudad.
En ese contexto, desde la Distribuidora Comercial, que estaba siendo cuidada por el dueño y trabajadores que se encontraban al interior
Con una escopeta dispararon en varias ocasiones contra los manifestantes
Luego de ver que uno de los locales de la empresa estaba siendo atacado a pedradas con la clara intención de saquearlo.
De acuerdo a las versiones conocidas hasta ahora e imágenes que se han conocido de lo sucedido, la situación fue más que grave porque producto de los escopetazos que se registraron contra los manifestantes
Resultaron tres personas lesionadas, dos de las cuales fueron trasladadas al hospital San Camilo y el tercero fue atendido en el mismo lugar.
La tensa situación continúo por varias horas, dándose incluso después de los disparos un enfrentamiento cuerpo a cuerpo entre manifestantes y trabajadores de distribuidora.
A propósito de lo que estaba sucediendo y una vez que se enteraron, unos cincuenta comerciantes sanfelipeños llegaron hasta la distribuidora El Sureño a solidarizar
Fiscal en el Lugar
Incluso, se conoció que momentos después de lo ocurrido llegó al lugar el Fiscal y Carabineros con el objeto de detener al comerciantes
Como autor de los disparos que habrían dejado a tres personas heridas, situación ante la cual los comerciantes que se encontraban lo impidieron
Los Comerciantes que se encontraban en el lugar, alrededor de 50, se echaron todos la culpa de haber disparado, por lo cual no se pudo detener a ninguno.